Por: Julio Alejandro Gómez Pereda / Palabras entre el café
Hace un tiempo que no escribo sobre Otro 18 (para quienes recuerdan, el nuevo proyecto de Aimel Ríos Wong contra Cuba), pero los acontecimientos recientes me invitan a dejar aquí un par de ideas nuevas sobre el tema.
El 11 de junio, Manuel Cuesta Morúa y Laritza Diversent, participaron en el evento anticubano “Construyendo el futuro de Cuba”, organizado por el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL), en República Dominicana, durante el evento, como bien ha referenciado otros colegas en sus blogs, la participación de estos di$identes fue pobre, y mal argumentada, al tiempo que el organizador Hernán Alberro, quedó muy mal parado al mostrarse parcializado y no permitir intervenciones de participantes que si apoyan a la Revolución Cubana.
Pero todo esto tiene su génesis en situaciones mucho más complejas y que se dan (a diferencia de todos estos eventos) dentro de Cuba.
Lo primero es que tanto Diversent como Cuesta Morúa, se están pidiendo la cabeza en la Isla, luego de que el segundo, acusara a la abogada de malversar los fondo$ enviados por la NED, para el proyecto Otro 18 y ésta para preservar su “honra” decidiera separarse del auto-denominado “Comité Gestor”.
En segundo lugar, la ausencia de Diversent, (que indiscutiblemente ha sido preparada por los yanquis para lucir conocedora de los temas en cuestión), del proyecto Otro 18, generó la necesidad de Cuesta Morúa de buscar nueva “asesoría legal” en el otrora “prestigioso di$idente” Wilfredo Vallín Almeida, quien sin mucho interés en estos temas, (increíblemente hace un análisis objetivo de lo poco viable que es dicho proyecto) ha ido tirando al gavetero de “asuntos sin importancia”, los trabajos que Cuesta ha solicitado, provocando que la superficialidad de la intentona, sea aún mayor de lo esperado.
Pero por si todo esto fuera poco, han quedado personajes resentidos y defraudados, como es el caso de Julio Antonio Aleaga Pesant, quien no se cansa de exponer en todos los escenarios, que Cuesta Morúa le robó su proyecto, luego de que conversaran al respecto, cuando esto era aún una idea en elaboración, presentándolo a la NED, oportunista y oportunamente.
Ya con esto podría ser suficiente, un grupo lleno de diferencias, con miembros que no se ponen de acuerdo y asesores que no creen en la idea, pero no es así, aún falta más, porque el resto de los miembros, como es de esperar, también están descontentos, pues Cuesta no para de viajar al extranjero y tiene a sus “seguidores” dentro de Cuba, en una espera que solo terminará cuando se disuelva el proyecto, como ha sucedido en más de 3 ocasiones con el propio Cuesta.
Sin embargo, no todo es tan complejo, hay cosas aún peores… Leonardo Ramón Calvo Cárdenas, que durante mucho tiempo fue “la mano derecha de Cuesta”, hoy está dispuesto a arrebatarle la “dirección” de Arcos Progresista, pues según él, Cuesta no ha sido constante ni atiende dicho “partido”, mientras que él, se encuentra en recesión, sin dinero, y con ganas de tener un menudito para los meses de verano.
Para terminar, cabría decir que como elemento interesantísimo, tenemos a José Daniel Ferrer, hoy de gira por el mundo, quien integra el Grupo Gestor de Otro 18, y comparte dicha posición con su ex esposa Yusmila Reyna Ferrera, quien no solo es ex esposa, sino ex miembro de la UNPACU, luego de haber renunciado por las contradicciones constantes con José Daniel, y otros detalles que podrían servir para un artículo sobre la violencia de género. Lo increíble es que a todas luces la presencia de Yusmila es una traición de Cuesta a José Daniel, sin embargo el agresivo primera plana de la UNPACU, tolera ésta situación y convive en medio del desastre. Indiscutiblemente éstos personajes desarrollan su olfato para los papeles de color verde, y saben dónde buscarlos.
Nada, que mientras la cosa siga así, los Revolucionarios no tendremos que ocupar más de media neurona para sacudirnos de estos temas, pero Aimel, Enrique Bravo y sus colegas de la NED, tendrán que sacar mucho más dinero del bolsillo del contribuyente y bajar la cabeza ante los papelazos en eventos como “Construyendo el futuro de Cuba”.
Palabras entre el Café 